martes, 28 de junio de 2011

Y si alguien nos preguntara: "¿También durante la noche, cuando nadie lo veía, estuvo el castillo ahí?", nosotros responderíamos: "¡Indudablemente! Hubiera sido imposible construirlo durante esta mañana; además el estado del edificio revela que no sólo estaba ayer ahí, sino hace centenares de años, antes de que hubiésemos nacido."
                                                                                                 Moritz Schlick

La escritura twitter como criterio: necesidad de concisión por falta de caracteres; prosa de agenda. Eso por un lado. Por el otro, escritura de computadora. Descripción de los hechos sin rastro de subjetividad adherida:
Río con vegetación. Cascada. Puente de piedra. Casas de piedra. Conjunto de árboles. Humanos desperdigados por el paisaje. Cielo sin nubes. Claridad.
Estoy comiendo frente a un río con cascada. Escribo. Leo también un poema de César Antonio Molina. Me gusta mucho el título, un arranque limpio y claro: OBLIGADO A ESPERAR DURANTE VARIAS HORAS EN EL AEROPUERTO DE PEKÍN DEBIDO A LAS INCLEMENCIAS DEL TIEMPO, PIENSO QUE YA ESTARÁN LAS LLUVIAS CAYENDO SOBRE EL EUME. Bien, muy bien. Pero por qué, una vez avanzado el poema, se pregunta esto: Envejezco en cada sala de espera/ ¿A dónde van a parar estas horas?/ ¿Podré reclamarlas al final de mis días?. No poeta no, sabes que no podrás reclamar nada al final de tus días salvo la putrefacción de tu cuerpo, que te llegará, sin falta, como el recibo de una hipoteca.

jueves, 23 de junio de 2011

Nota sobre Bukowski

El materialismo de Bukowski consiste en que cualquier verso suyo se puede dibujar en un eje de coordenadas.
Su escatología ensucia el realismo y niega y ataca la retórica y la grandilocuencia de los malos poetas.
Sus versos describen o enumeran acciones concretas y destilan el aroma del individuo libre: única mitología operativa de nuestro tiempo.

De compras en Follas Novas (Hojas Nuevas):

- Ezra Pound Guía de la kultura 
- César Antonio Molina Eume 
- Friedrich A. Hayek Principios de un orden social liberal 
- Leonard Cohen Libro del anhelo

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miércoles, 22 de junio de 2011

Hoy alguien que escribe dice en el periódico que los escritores tienen la misma superioridad moral que los médicos o los panaderos. Pero lo que todavía destila esta frase es la superioridad moral de los escritores aceptando bajar a la tierra para ser mortales. Y no. Los escritores tienen mucha menos superioridad moral que los médicos o los panaderos porque llevan viviendo de algo que nunca tuvieron durante siglos. Que no nos perdonen la vida. Los intelectuales hace mucho tiempo que son la casquería del intelecto.

miércoles, 15 de junio de 2011

La vuelta a la semana en 7 deposiciones

Miércoles
Estoy en Santiago, en la calle del Villar, tomando un té con limón en la terraza del bar Suso rodeado de peregrinos. Leo Camino de Servidumbre.
Jueves
Escribo estas letras desde Corcubión. Sentado en el restaurante del hotel El Hórreo.
El servicio y la comida son excelentes y en el comedor se está a gusto. Hoy en día es difícil encontrar unidos, en un país de camareros como es España, servicio de calidad y negocio rentable.
Antes de comer paseé por el pueblo: no hay nada mejor, para mi naturaleza muerta, que el confort que suministra un buen negocio hostelero: ni puertos ni iglesias ni naturalezas.
Ah, estos momentos de conformidad transitoria...
Viernes
Desde mi ventana veo caer la lluvia. Lluvia fina que zarandea el viento. El cielo recupera su habitual color gris sucio engolfando con él el horizonte de bosques y construcciones. Por su parte, el que esto escribe, permanecerá  en su despacho a salvo de la intemperie disfrutando del confort que suministra la civilización.
Sábado
Estas declaraciones del cantautor español Nacho Vegas son un claro ejemplo de que escribir magníficas canciones no está ni mucho menos reñido con tener opiniones políticas de perfecto pánfilo: "hoy en día, cuando las políticas neoliberales han dejado en la calle a familiares y amigos míos y han recortado derechos fundamentales a la mayoría de la gente, que además está saliendo en masa a la calle, no puedo evitar pensar que cualquiera que se declare de derechas ha de ser un cretino o un cabrón. O un potentado."
Domingo
Escribo esto de madrugada, mientas le cambio el cartucho de tinta a la estilográfica. El día fue soleado y entretenido. Entretenerse: olvidarse de aquello que te clava los dientes.
Lunes
Me siento viejo y cansado. Hace tiempo que me siento así y me gusta. Me gusta sentirme viejo. Cada día más viejo. 
Martes
Estuve comiendo con un amigo en La Coruña. Es una ciudad muy grande para vivir en ella.



sábado, 11 de junio de 2011

Cuenta Solzhenitsyn...

Cuenta Solzhenitsyn que en aquellos maravillosos años, a la hora de juzgar a un acusado, su confesión era más importante que toda clase de pruebas y hechos. Un poco más adelante, cita la 5ª Enmienda de la Constitución de EE.UU para comparar ambas legislaciones: Nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo en un proceso penal. Impresiona.

miércoles, 8 de junio de 2011

Vuelo FTV- MAD 31/05/09

A mi lado una chica lee Rayuela. A ojo, diría que es uruguaya o argentina. Demasiado entregada a la causa para ser española.
Al despegar le entró el sueño. Bajó la persiana, apoyó la cabeza contra la ventana y cerró los ojos en mi dirección. Cuando creí que dormía me dediqué a espiarla. Tenía un tesoro escondido. Un tesoro lascivo. El libro le quedó de pie y abierto entre la pelvis y los pechos, que si ya eran grandes, firmes y duros ahora cobraban, con ese apoyo, dimensiones espectaculares. Mis ojos se clavaban en ellos con delectación, escudándome, en caso de peligro, en la belleza del paisaje celeste. No en vano la virtud que más valoro en una mujer son sus tetas; aunque si y sólo si, éstas son intolerables.
Yo, por mi parte, puse mi libro de Martin Amis sobre la mesita desplegable enseñando mis cartas: Dinero. No, no soy una buena persona. Mira qué tipo de libros leo, ¡soy capitalista!, el anti- Cortázar par excellence.
En medio de la contienda me preguntó si podía dejarle pasar para ir al aseo. Entonces descubrí dos cosas fundamentales: su españolidad y unas tetas que se defendían solas, sin ayuda de libros, unas Tetas con mayúsculas.
Cuando volvió y me vio escribiendo en la libreta la noté interesada. Se sentó, se soltó el pelo y cogió una piruleta del bolso que tenía en el suelo. Fue entonces cuando descubrí que llevaba sandalias y que tenía los pies casi desnudos. Me fue imposible mirar para ella con la piruleta en la boca. Si nuestros ojos llegaban a cruzarse, no garantizaba que mi pene siguiera en posición de descanso. Las azafatas, aunque beldades, no dejan de ser cisnes estirados. Más estirados cuanto más observados se sienten. Yo, en este caso, y aunque me duela, siempre prefiero progre en mano que derechista volando. No se debe olvidar que una mujer puede arruinar a un hombre sólo con sus tetas. Yo por lo menos es algo que siempre tengo presente cuando vuelo.
Podría decirle que leí Rayuela en esa misma edición que tuvo entre sus pechos y la pelvis dos o tres veces entre los 18 y los 20 años; que Julio Cortázar fue mi primer amor literario fuerte; que fue una novela vital en mi educación sentimental mientras me presento como un tío sensible. Pero por qué hacerlo, prefiero ser honesto y decir la verdad: que me gustaría manosearle las tetas al llegar a Barajas. Y es que uno no puede evitar ser un caballero.
Así que me conformo con mirarle esa afortunada secuencia genética tranquilamente mientras la cortina de su pelo estratégicamente desplegado me protege.
Felizmente la cosa no acabó ahí, aún pude libar otra performance erótica antes de aterrizar.
Cuando se cansó de la metafísica masoquista de Horacio Oliveira cerró el libro, lo guardó en el bolso y volvió a dormir. Esta vez, dándome la espalda. Pude observar entonces el fragmento de piel desnuda correspondiente a la zona comprendida entre la blusa transparente solo por la espalda y el vaquero. Fragmento de piel que dejaba escapar una tirita de braga negra, preludio del resto. Por fortuna no pude ver más y hubo entonces una alta concentración erótica que habría disminuido a medida que hubiera aumentado la seda negra de su intimidad.
Pechos firmes y duros, vaqueros viejos, sandalias de charol negro y pies desnudos, una tira de seda negra, carne que desborda la ropa. Fuego animal convertido en cultura.

lunes, 6 de junio de 2011

La literatura no puede cambiar el mundo, dicen los literatos. Produce sonrojo la revelación de tamaña perogrullada. Cualquiera sabe - aunque a los literatos les ha llevado más tiempo que al resto - que la literatura no cambia nada.¡Y menos mal! Qué mundo sería aquel hecho a medida del deseo y la voluntad de los literatos.